miércoles, 18 de enero de 2012

Caso FEG: matan a jóvenes para borrar testigos


El arraigo de cuatro sospechosos permite reconstruir los homicidios en el edificio fegista

Redacción

Con el arraigo de un joven de 19 años y tres menores de edad, personal de la Procuraduría General de Justicia del Estado de Jalisco (PGJ), logró reconstruir los homicidios de cuatro estudiantes y el padre de uno de ellos, cuyos cuerpos fueron encontrados en el patio del edificio de la FEG el 14 de diciembre del año pasado.
Por medio de un comunicado, el personal de la PGJ informó que el 9 de diciembre, al edificio de la FEG, ubicado en la calle Carlos Pereira, llegaron el comerciante Armando Gómez Gallardo, de 56 años, acompañado de su hijo Francisco Ismael Gómez Saucedo, de 21 años, junto con Gabriel Morán Cervantes, de 17 años, Juan Pablo Valentín Guerrero, de 16, y Francisco Javier Carrillo García, de 17 años.

(FOTOS: Especial) Los cuerpos fueron hallados el 14 de diciembre

Según las investigaciones de la dependencia, el comerciante y su hijo tuvieron una discusión con el hombre identificado como El Tatuado, pero luego ingresaron a la oficina de David Castorena, quien sería el sustituto de Israel Mariscal, actual presidente de la FEG. Afuera de la oficina se quedaron Gabriel, Juan Pablo y Francisco Javier.
Después de unos minutos se escucharon detonaciones de arma de fuego e inmediatamente David Castorena salió de la oficina hablando por teléfono.
Tras de él salió El Tatuado, quien le ordenó a varias personas que estaban en el lugar que metieran por la fuerza a los tres acompañantes del comerciante y de su hijo, o cual hicieron.

El edificio de la FEG fue desalojado el día del homicidio, para que nadie viera la inhumación clandestina

Luego dieron la orden de que el edificio fuera evacuado, pues había actividad en otras áreas de la FEG.
Cuando ya no había nadie en la sede, El Tatuado, David Castorena y otras personas, entre ellos Gabriel, Juan Pablo y Francisco, cavaron dos fosas.
En una de ellas pusieron los cuerpos de Gómez Gallardo y de su hijo, pero luego apuñalaron a Francisco, Juan Pablo y a Gabriel, quienes fueron sepultados en la segunda fosa.
Debido a que no regresaron a sus casas, los familiares de las cinco víctimas pusieron una denuncia por su desaparición, por lo que la PGJ inició las indagatorias necesarias y fue así que hallaron los cuerpos enterrados en las instalaciones de la FEG.
Además, en el edificio fue hallada una pistola tipo escuadra, calibre .32, la cual se confirmó que fue usada para matar al comerciante y a su hijo.
Las autoridades lograron saber que la alfombra que había en la oficina de David Castorena había quedado manchada de sangre, pero fue sacada del lugar y quemada, sin embargo, por medio de la prueba de luminol, los investigadores descubrieron que existían restos de sangre en el lugar.
Ante estos hechos, la PGJ solicitó órdenes de aprehensión contra El Tatuado, David Castorena y otras 12 personas involucradas, las cuales fueron concedidas por un juez penal.



David Castorena no se ha presentado a declarar ante la Procuraduría General de Justicia del Estado de Jalisco
  


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