Será responsabilidad de la
próxima Administración estatal iniciar con su operación, advierte Emilio González,
gobernador de Jalisco
Guadalajara
Con bombo y platillo fue
inaugurado en nuevo Reclusorio Metropolitano de Puente Grande, evento en el que
estuvieron personalidades como Emilio González, gobernador de Jalisco, y Luis
Carlos Nájera, secretario de Seguridad Pública.
Pero el reclusorio, que
tiene una capacidad para 1,700 presos y a decir de las autoridades, cuenta con
modernos dispositivos tecnológicos, aún no está en funcionamiento; nadie lo
habita.
Además, falta también
contratar a los 1,200 custodios que laborarán en él, repartidos en tres turnos.
Al respecto, el gobernador
jalisciense indicó: "Ya dependerá del próximo gobierno, la obra está
concluida, pero es importante que primero se sepa cómo va a quedar la estructura.
Vienen modificaciones a la ley orgánica, me parece que a nueve días de que
termine este gobierno lo prudente es entregarlo así terminado para que la nueva
autoridad decida los momentos".
El costo del inmueble fue
de 1,700 millones de pesos, de los cuales, el 55 por ciento lo aportó el
gobierno federal y el resto la
Federación, según dijo el mismo gobernador.
En su discurso, Luis
Carlos Nájera destacó que este inmueble ayudará a despresurizar la sobrepoblación
que hay en las cárceles estatales actualmente, que es alrededor del 67 por
ciento, además de que afirmó que es más seguro, pues las puertas de las celdas
se abren de manera remota, lo que evita que custodios e internos tengan mucho
contacto.
Por su parte, Emilio González
indicó que esta penitenciaría también ayudará a brindar mejores condiciones a
los reos, así como facilitará su proceso de rehabilitación y reintegración a la
sociedad.
“Cuando se delinque, qué
se tiene que hacer, que comparezca y que reciba en respuesta, lo que la ley le
tiene preparado, no como venganza, sino para que se reintegre a la sociedad. No
es detener sino reintegrar, una persona es alguien que se puede reintegrar, y
ser respetuoso de la ley, no nace con el sello de delincuente, no tiene sello,
la persona no es alguien que tenga ya escrito su destino, como estar en un
reclusorio”, dijo el gobernador.
“Son espacios de
reintegración, para que reconozcan su falta y que sepan que no es el camino,
reintegración porque se necesita de todo”, enfatizó.
Las instalaciones
El Reclusorio
Metropolitano cuenta con celdas automatizadas con capacidad para tres reos cada
una. Tiene una mesa, sillas semifijas, un retrete y una regadera. El metal de
las puertas tiene una duración de 50 años.
Está equipado con 500 cámaras
de vigilancia y tiene cercos de malla ciclónica y alambre de púas en la parte
superior.
Las torres de vigilancia
tienen vista hacia los caminos y áreas de esparcimiento para los reclusos.
La reja perimetral cuenta con
una alarma que se acciona si es tocada.
Los ingresos tienen equipo
de rayos X, lectores de tarjetas y barreras de contención automatizadas que pueden
detener camiones de tres toneladas a una velocidad de entre 70 y 80 km/hr.
Cuenta con 4 mil dispositivos
electrónicos
Tiene 900 puertas automáticas
Cuenta con sistemas de
intercomunicación, que evita el uso de radios y celulares.
Tiene equipo de monitoreo
que detecta cuando se enciende un teléfono celular e identifica a la compañía
operadora.