¿Quién era El Mike?

Procurador estatal indicó que cotejaron sus huellas dactilares; arrastraba negro pasado

Redacción / Guadalajara

El hombre que fue asesinado la noche de este lunes en la colonia San Carlos sí era Miguel Ángel Azueta Ontiveros, apodado El Mike, quien presuntamente fue líder del autogobierno en el Reclusorio Preventivo Metropolitano, ubicado en el complejo penitenciario de Puente Grande, Jalisco.

Así lo informó el Procurador de Justicia, Tomás Coronado Olmos, quien indicó que la identificación fue por medio de la comparación de las huellas dactilares del cadáver con las que tiene la dependencia en sus registros, aunque todavía falta que un familiar acuda a reclamar el cuerpo al Servicio Médico Forense.

El Mike era sobrino de Manuel Salcido Azueta, mejor conocido como El Cochiloco, quien fue asesinado el 9 de octubre de 1991 en el cruce de Lapislázuli y Obsidiana, en una supuesta vendetta de narcotraficantes de Colombia, pues presuntamente les había robado en Colima cuatro toneladas de cocaína de un cargamento total de ocho toneladas que iban en el barco El Chingorazo, con destino a Ensenada, Baja California.

Según consta en expedientes de autoridades federales, El Cochiloco fue fundador del Cártel de Guadalajara al final de la década de los 70, junto con Miguel Ángel Félix Gallardo, Rafael Caro Quintero, a quienes posteriormente se les unieron Ernesto Fonseca Carrillo (Don Neto), Juan Ramón mata Ballesteros, Juan José y Rafael Emilio Quintero Payán, así como Juan José Esparragoza, El Azul, y Pablo Acosta Villarreal.

El Mike fue detenido en 1991, tras un atentado en contra del joyero Tomás Colsa McGregor, pero tras fallar en su intento, se parapetó en unos locales de Plaza Universidad, donde se enfrentó a balazos con policías de Zapopan. En la balacera murió un oficial.

Colsa McGregor era un joyero asentado en Guadalajara que durante varios años elaboró joyas tanto para narcotraficantes, políticos y empresarios. Colsa McGregor, quien sobrevivió al ataque, fue persona cercana a Amado Carrillo Fuentes, El Jefe de Jefes, quien lo protegió en varias ocasiones, pues éste logró contactarlo con políticos y agentes federales para que lo dejaran trabajar, a cambio de sobornos.

Sin embargo, Colsa McGregor se convirtió en testigo protegido de la PGR y puso al descubierto la organización del Cártel de Juárez, encabezado precisamente por Carrillo Fuentes, y su relación con altos mandos de la PGR y el Ejército. Pero en junio de 1997, el joyero renunció a ser testigo protegido y días después fue encontrado torturado y muerto en un hotel del Distrito Federal.

En 2010, personal de la Secretaría de Seguridad Pública del Estado y del Ejército realizaron una revisión en el Penal Metropolitano de Guadalajara, donde aseguraron dos armas largas, dos cortas, cartuchos, kilo y medio de cocaína y varios teléfonos celulares. Las investigaciones de la PGR condujeron a que El Mike era el dueño de las armas y la droga, además de que su amasia, María de Jesús Hernández Regil, era quien introdujo tales objetos al penal. Sin embargo, no hubo sentencia al respecto.

Hernández Regil declaró que conoció a Azueta Ontiveros en el penal, cuando iba a visitar a un medio hermano que también estaba preso.

La mujer agregó que luego de que El Mike fue liberado, en diciembre de 2010, la buscó y cuatro meses después empezaron a vivir juntos.

El lunes 14 de enero de este año, Azueta Ontiveros conducía una camioneta Acadia 2011 por las calles de la Colonia San Carlos; con él iba Hernández Regil y una niña de año y medio, al parecer, hija de ambos.

Justo en el cruce de Violeta y J. Luis Verdía, varios hombres que iban en una camioneta Odisey le cerraron el paso; dos de ellos bajaron y le dispararon en repetidas ocasiones con armas de fuego calibre 9 milímetros, para entonces escapar.

El Mike recibió al menos 19 balazos en cráneo, tórax y abdomen, pues fueron las heridas que registraron los médicos legistas que le practicaron la autopsia a su cadáver.

La mujer resultó con una herida en un pie, a causa de una esquirla; la niña quedó ilesa.